España, uno de los destinos turísticos por excelencia, a nivel mundial, está sufriendo la crisis provocada por el coronavirus (covid19). Destinos consolidados, maduros, que se han visto avocados a verse desalojados, con calles vacías y hoteles que parecen fantasmas, ocupados por algún miembro de la fauna autóctona de la zona, como ha ocurrido en Fuerteventura, cabras que han ocupado parte de un hotel ubicado en la isla.

El COITTCAN, demarcación del COITT en Canarias, lleva durante los últimos cinco años, organizando el Congreso de Turismo Digital, con el objetivo de mostrar la implementación y las posibilidades que la tecnología ofrece al sector del turismo, para Canarias, considerado el sector primordial de la economía, con un 33% del PIB de las islas.

A nadie se nos escapa que la crisis provocada por el covid19, traerá consigo, grandes reformas y profundas transformaciones en la sociedad, pero ¿afectarán al sector del turismo?, ¿Nos lanzaremos a viajar después de pasar 30 días confinados?, ¿estarán los hoteles a la altura de las necesidades, después del parón obligatorio?, ¿Qué cambios se habrán producido en el ámbito del alquiler vacacional? Sin duda algunas innumerables cuestiones que sólo el futuro próximo nos develará.

La organización del evento mencionado, por parte del COITTCAN, nos ha obligado a reunir diferentes profesionales o equipos de profesionales, relacionados de forma directa o indirecta con el sector turístico. Equipo de personas que nos han proporcionado una visión diferente del sector que se ocupa del ocio y la felicidad, tal y como lo conocemos. La tecnología es un campo, muy importante en el turismo, pero que no se aprecia, forma parte intrínseca de los servicios que los diferentes operadores o empresarios turísticos ofrecen o pueden ofrecer al usuario.

Un turista, que debe ser considerado como un “residente durante un corto espacio de tiempo” necesita, cada vez más, de las infraestructuras que le permitan hacer uso de las diferentes modalidades de comunicación, entretenimiento o servicios, que las tecnologías les pueda permitir. Acercar los servicios del destino, o simplemente disponer de infraestructura que permitan la comunicación del usuario con homólogos ubicados en otros lugares, hace posible que un alojamiento pueda tener o no, éxito en la ocupación.

Sin duda alguna la ingeniería y en este caso las telecomunicaciones, ofrecidas o puestas en marcha por los Ingenieros Técnicos de Telecomunicación (ITT), nos va a permitir poner en valor un destino que, aparte de sol y playa, puede ofrecer infinidad de opciones y experiencias personalidades, que sólo la tecnología o través de ella, se pueden conseguir. Las diferentes plataformas, apps o servicios ofrecidos con tecnología harán, sin lugar a duda, que la industria del descanso, el ocio y la felicidad, vuelvan a ser el primer objetivo, marcados por todos, a corto plazo.

En el 2020 se han visto obligados a cancelar muchos eventos, como el Congreso de Turismo Digital mencionado, que hemos de retomar con la frescura y la ambición que, desde el COITTCAN, le dedicamos cada vez que comenzamos una nueva edición. La puesta en valor de la tecnología como el medio para acercar o llevar al usuario las, diferentes ofertas y servicios que pueden ofrecer los operadores turísticos, hace que los profesionales de las telecomunicaciones, deban ser considerados como auténticos héroes invisibles del buen hacer de las comunicaciones. Así, han sido partícipes a la sombra, durante el estado de alarma provocado por el covid19, en nuestro país.

De todos es conocido que España tiene un gran despliegue de fibra óptica en su territorio, pero aún existen zonas aisladas, en pequeños núcleos de las islas, o en zonas poco pobladas en la España vaciada, que, por poca rentabilidad, los distintos operadores no han tenido en cuenta en el despliegue de sus infraestructuras, quedando así desconectadas del avance de las comunicaciones, tal y como se ha visto en esto momentos de crisis. Este hecho también tiene lugar en pequeños destinos turísticos, a los cuales no llegan las infraestructuras más avanzadas, no permitiendo que el turista, todos los servicios u oportunidades que un destino maduro, como Canarias, puedes ofrecer al viajero.

La televisión, la radio, internet, los servicios de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad o el teletrabajo, como se está viendo durante la situación provocada por el covid19, son servicios que día a día los ingenieros técnicos de telecomunicación gestionan y mantienen para que sigan proporcionando la posibilidad de “estar conectados. Sin duda, profesionales de las infraestructuras, redes y servicios de telecomunicaciones que hacen posible que la España de los balcones, sea una España conectada, ya que tienen, entre un gran abanico de competencias, garantizar el servicio y la seguridad en las comunicaciones.

Bajo otra perspectiva, la sociolaboral, el teletrabajo se ha convertido en todo un reto para aquellos que lo veían como algo futurista o simplemente no lo contemplaban como una forma de trabajar. Grandes y pequeñas empresas se han visto avocadas a hacer uso de una modalidad que permite entre otras cosas, conciliación familiar, menor contaminación por movilidad o menor contaminación acústica.  Un respiro al planeta, que quizás permita retrasar la llegada del tan poco deseado cambio climático. Por otro lado, el comportamiento de las familias en un ambiente de confinamiento será un gran estudio por parte de los sociólogos.

Pasada esta crisis sanitaria que afecta a todas las economías del mundo, con estados de alarma impuestos en muchos países, obligando a un confinamiento de la sociedad, las personas volveremos a salir a la calle y volveremos a tener ganas de viajar, conocer otros lugares, en definitiva, aún con todos los cambios que esta situación pudiera provocar, volveremos a “ser turistas”.  Podremos volver a disfrutar de un mercado en Gambia, un amanecer en Marruecos, paisajes de la Costa Brava o las playas de Canarias.  Le corresponde a una de las industrias más afectadas, con el cierre de hoteles como ha ocurrido en nuestro país, volver a activarse, volver a poner en marcha la innovación, implantar tecnología para conseguir atraer nuevos clientes, quizás con otras perspectivas, quizás con otra forma de pensar, pero con el objetivo de conseguir un nuevo “residente durante un corto espacio de tiempo”, para conseguir que la industria del ocio y la felicidad vuelva a funcionar.

En la medida en que la sociedad ha madurado en torno al desafío digital, y que tanto el ciudadano como el turista ha hecho suya el uso de la tecnología, se abren diferentes posibilidades de disfrutar de todo aquello que conlleva un Smart Destination, para ello es necesario actuaciones conjuntas de marketing entre las diferentes entidades implicadas. El turista prioriza sus destinos en función del riesgo, permitiéndole disfrutar de su tiempo de ocio sin preocupaciones. La seguridad y la protección de los turistas son requisitos asociados al desarrollo del sector, así como en el ámbito de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones.

La excelencia y la sostenibilidad siguen siendo retos alcanzables a través de la innovación que permiten al turista viajar con otras motivaciones y expectativas, teniendo en cuenta siempre que la tecnología es el medio que posibilita el cambio de la industria turística, adaptándose siempre a las necesidades del cliente. La innovación es fundamental en este sector, y supondrá el avance hacia fórmulas turísticas más sostenibles. Todo lo relacionado con aspectos tecnológicos es fundamental, pero sería interesante no olvidar nunca que la verdadera innovación está en las personas. El principal reto es, por tanto, “no gestionar el turismo en una ciudad sino gestionar una ciudad turística”.

Sebastián Suárez (Colegiado 6847)

Decano Colegio de Ingenieros Técnicos y Graduados de Telecomunicaciones de la Demarcación Canarias