Josué López (Madrid, 1973) no quería ser empresario cuando era niño. De hecho, quería ser cualquier cosa menos eso. Por cosas de la vida acabó fundando APTICA, empresa puntera dedicada a la provisión de servicios de Consultoría e Ingeniería.

Colegiado desde 2002, Josué tiene en Mallorca su paraíso desde hace veinte años, un lugar “donde no hace falta ser alemán para desear jubilarse allí”. El pádel, la bici o salir a correr están entre sus aficiones, aunque una vez al año hace barranquismo con sus amigos.

Hablamos con Josué sobre su trayectoria y la actualidad del sector de las telecomunicaciones.

¡Hola Josué! Dado tu perfil de empresario, me gustaría comenzar la entrevista preguntándote por un valor que destacas en los compañeros de trabajo.

Valoro mucho la honradez en las personas. El mundo laboral no deja de ser una extensión del personal. A todos nos gusta la tranquilidad de poder confiar en la gente con la que nos relacionamos, ya sean amigos, compañeros, clientes o proveedores.

Dentro de la transformación digital en la que estamos inmersos, ¿Qué áreas consideras más importantes y en cuál se debe comenzar a trabajar con más empeño y compromiso?

 En más de veinte años de profesión hemos visto pasar muchas tecnologías con diferentes niveles de éxito pero, por desgracia, algunas de ellas no han tenido una repercusión importante en la sociedad.

 La llegada del 5G creo que se está planteando desde una perspectiva muy interesante: promoviendo el desarrollo de nuevos servicios finales en paralelo a la evolución de la propia tecnología. Este modelo va a poner en manos de los usuarios nuevas funcionalidades y experiencias en muy corto tiempo. En este sentido, creo que hay mucho trabajo por hacer en ámbitos como la automatización industrial, el IoT, la movilidad o la generación de nuevos contenidos y experiencias para el usuario.

Pongamos que esta entrevista la lee un universitario/a. ¿Por qué le animarías a estudiar telecomunicaciones?

En primer lugar, porque es una profesión extremadamente versátil y que te permite tocar áreas de actividad muy variadas. En segundo lugar porque permite trabajar en cosas que pueden transformar la sociedad.

Por otro lado creo que cuenta con una proyección laboral muy buena, por encima de otras profesiones e incluso de otras ingenierías.

¿Dónde recomendarías ampliar conocimientos al terminar la carrera de Telecomunicaciones?

Es difícil de decir. Creo que hay muchos ámbitos de conocimiento en los que hay futuro con nuestra profesión y que requieren especialización. Somos de los pocos colectivos que podemos permitirnos especializarnos en lo que nos gusta y después trabajar en ello.

Cambiamos de tercio. ¿Cómo ves la presencia femenina actualmente en el sector? ¿Cuáles son las asignaturas pendientes en este campo?

 Creo que sigue siendo baja. Desde luego hoy hay mucha más presencia femenina que años atrás, sin embargo seguimos siendo más hombres que mujeres.

Entiendo que es un problema de educación y de orientación profesional desde la infancia que debemos ir corrigiendo. Desde luego no se me ocurre ningún motivo por el cual las telecomunicaciones resulten menos atractivas a un sexo que a otro.

Ya estamos terminando, pero antes queremos conocer tu opinión como experto. ¿Cuáles son los mayores retos de las telecomunicaciones ahora mismo?

La implantación del 5G me parece una oportunidad fascinante que abre la puerta a otras innovaciones. En todo caso, creo que el mayor reto consiste en transformar la sociedad hacia un mundo con una mayor presencia de la tecnología sin afectar a la privacidad y seguridad de las personas.